A un efectivo le dieron 15 días de arresto y su traslado a la guardia de Infantería, mientras que al otro, 20 días de arresto y su traslado a Río Gallegos. Una inusual sanción ordenó el jefe de la Policía Federal a dos uniformados de la fuerza que, en persecución de delincuentes, chocaron los patrulleros en el barrio de Belgrano el martes pasado.
A uno le dieron 15 días de arresto y su traslado a la guardia de Infantería, mientras que al otro, un agente de la seccional 29a, 20 días de arresto y su traslado a Río Gallegos por destruir bienes del estado, pese que todavía este último está con carpeta médica por el golpe producido en el accidente y que lo dejó 10 minutos inconscientemente en el lugar.
La sanción más fuerte, recayó sobre el conductor del móvil de la seccional de Chacarita la 29a, el agente Gregorio Lobo, un hombre que según vecinos que se comunicaron con Precinto56.com.ar es "trabajador, honesto, leal y que dentro de dos semanas, tiene que dar dos parciales para recibirse de contador. El jefe de la policía, le destruyó la vida, sólo por cumplir con su deber", dijo el vecino conocedor de las vivencias de su barrio en Chacarita.
El hecho ocurrió alrededor de la 1 de la madrugada del día 24, cuando los delincuentes circulaban por el barrio porteño de Chacarita a bordo de una camioneta Volkswagen Suran y, al pasar un control policial en jurisdicción de la comisaría 29na., hicieron caso omiso a la orden de detenerse y aceleraron para fugarse.
La persecución continuó y se trasladó desde Chacarita hasta el barrio de Belgrano, donde se integró a la búsqueda un patrullero de la comisaría 37a.
Según dijeron los voceros, los dos agentes que observaron lo que sucedía subieron inmediatamente al móvil policial y comenzaron a perseguirlos, mientras solicitaban que se sumaran refuerzos a través del comando radioeléctrico.
Durante la persecución, los delincuentes tomaron distintas calles en contramano y, al llegar al cruce de Olazábal y Vidal, efectuaron una maniobra que les permitió evitar a ambos móviles policiales que pretendían encerrarlos, lo que hizo que éstos chocaran entre sí.
La banda a bordo de la Suran se vio beneficiada por la colisión y así consiguió escapar, mientras que los cuatro agentes en los patrulleros tuvieron que ser socorridos por la asistencia médica de emergencia con distintos politraumatismos. Fuente Nova Noticias
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